Por bailar 200
si enseñas las bragas más.
Y miro entre los huecos de sus incisivos de leche
a ver si allí
entre el sarro verde de lo putrefacto
atisbo las putas tetas.
Y busco tras su iris izquierdo
el calor
y no lo encuentro,
tal vez mañana...
Y unas manos me abrazan con fuerza el cuello.
Que el abrazo no sea ahorque.
ResponderEliminarA tu salud!